Controversias, la exposición recién abierta en el Museo del Elíseo de Lausana, expone 80 fotografías seleccionadas por Daniel Girardin. Esta exposición, subtitulada historia ética y jurídica de la fotografía, se supone que "intenta" dar respuesta a los límites éticos de esta profesión, con fotos de rompe y rasga con temas tan sensibles como la dignidad de las personas, el respeto por lo sagrado o el tratamiento del sexo. ¿Vale todo?, ¿no hay ningún principio que debamos salvaguardar más que la libertad artística y creativa del fotógrafo?
La realidad es que esta muestra da la impresión de nos ser más que una postura (también desde el punto de vista jurídico y de imagen), pues desde el principio se han puesto a la defensiva: "La exposición no tiene, vocación alguna de provocación" según el comisario Girardin. Pero no se queda ahí, y afirma que su principal interés consiste "en constatar cómo la tolerancia cambia con el tiempo", o sea que lo que antes no valía, con el tiempo puede cambiar... Me parece un discurso erróneo y muy peligroso: la dignidad humana no cambia con el tiempo, ni aunque unos cuantos se pongan de acuerdo, al menos eso recoe la Declaración Universal que todos aceptamos.
martes, 8 de abril de 2008
¿Los límites de la creatividad? la dignidad humana
Publicado por Jordi Pujol Soler en 10:39
Etiquetas: comunicación, cultura, ética, fotografía, manipulación
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1 comentarios:
Hay fotógrafos que son una banda de mercenarios: lo que hacen no es arte sino mera provocación. Para provocar de esa manera hacer falta ¡ser cínico, no creativo! Las pasta que sacan acosta de lo que ellos llaman "reflejar el dolor" o "denunciar situaciones".
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