La publicidad en los teléfonos móviles se presenta como una alternativa a la saturación en los medios tradicionales por muchas razones. Está claro que hay mercado: se calcula que hay 49,58 millones de lineas telefónicas activas. El soporte está activo 10 horas al día, con unas posibilidades audiovisuales en constante crecimiento que ofrecen bastantes posibilidades a los creativos, y además, el mensaje se puede personalizar. Tiene buena pinta, pero puede acabar igual que los buzones de correo electrónico: ¡saturados!
Quizá este soporte nos haga reflexionar y darnos cuenta que el consumidor se defiende del exceso de mensajes cortando por lo sano, por tanto, se debería contar con su beneplácito. También es la ocasión de dejar de tratar a los usuarios como si únicamente fueran impulso-instinto. Con el sistema de contínua estimulación a base de ofrecer contraprestaciones, quizá ganamos a corto plazo, pero quemamos la relación con el potencial cliente.
martes, 15 de enero de 2008
Publicidad en el móvil: ¿más de lo mismo?
Publicado por Jordi Pujol Soler en 11:19
Etiquetas: comunicación, ética, ocio, Publicidad, teléfono móvil
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1 comentarios:
great week
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